Entre luces de feria

Entre luces de feria | Varias autoras | Roomie Ediciones | Histórica, drama, romance, fantasía, ciencia ficción | Antología | 420 páginas | 16,65/3,99€ | 9788412373714 | Comprar en físico y digital

Una niebla espesa envuelve toda la feria. Se enreda en la noria, sale por el tren de la bruja y causa estragos allá por donde pasa.

Hay una estrella en el cielo que intenta, sin mucho éxito, iluminar el recinto y darles suerte a los lanzadores de cuchillos.

Pero eso no impide que las flores se marchiten, que la marea suba y que los visitantes acaben en llamas. ¿Podrán apagarlas antes de que consuman la alegría?

En esta antología disfrutarás de la feria de tus sueños: paséate por las casetas de estas ocho historias y descubre el parque de atracciones más peculiar del universo. ¡Diviértete!

De las cosas que más me destacan en las dos antologías de la editorial que he leído son: la primera, que la temática es bastante amplia y las personas que participan pueden crear relatos de lo más diversos sobre ella y, lo segundo, que todos los relatos me suelen gustar, unos más que otros, pero en general los suelo disfrutar. En el caso de Entre luces de feria puedo decir que todos, absolutamente todos los relatos me han gustado. Hay algunos más que otros, pero en general, me ha costado decidirme por mis favoritos. De hecho, no tengo ni por qué elegir favoritos, pero me gusta mencionarlos. En este caso han sido: Tres pétalos, de Ester Isel; Marea incendiaria, de Laura Martín Hinojal; Demasiada suerte, de Maeva Nieto y Cosas que pasan en la niebla, de Mar Román.

La antología comienza con el relato Final de trayecto, de Alicia Gadi, una historia ambientada en España en los setenta con saltos temporales en la narración. Es un relato que me ha gustado, pero me costó un poco pillarle el truco a la narración de Alicia. Eso sí, la ambientación de esa época me ha parecido una delicia porque es como si yo lo hubiera vivido (y no es el caso, obvio). Le continúa el relato de Andrea D. Morales, A un lanzamiento de cuchillo, una historia romántica que tiene lugar en un circo. Me gusta que se haya salido del concepto de feria que pedía la convocatoria para meter un circo. Es un relato cuquisímo de dos mujeres sáficas y cómo se van conociendo y enamorando.

Sin duda alguna, los relatos más duros que he leído en esta antología han sido los dos siguientes: Tres pétalos, de Ester Isel y Marea incendiaria, de Laura Martín Hinojal. He descubierto el talento de dos increíbles autoras gracias a esta antología y espero poder leerlas otra vez. El relato de Ester es una muestra de las injusticias que solemos sufrir las mujeres y cómo es el proceso mental que sigue a un hecho cómo es. Un relato muy duro, pero muy necesario. Por otro lado, Laura nos muestra una feria que está en proceso de construcción y los orígenes del movimiento antirracista. Es un relato que tiene todo lo necesario para que esté completo y me ha encantado su forma de narrar.

«Ahora sabía que las marcas en la piel carecen de importancia y que existen otras invisibles pero más peligros e imposibles de ignorar.» —Tres pétalos, de Ester Isel.

La estrella que más brilla, de Lucía G. Sobrado, es el relato de ciencia ficción de la antología. Nos encontramos con una nave espacial y dos protagonistas que la lían mucho, así que son enviados a investigar una importante estrella junto a otras personas maleantes de la nave y descubren un parque de atracciones. Es un relato que se lee bastante rápido, tiene acción y no me esperaba para nada el desarrollo final. Otro de mis relatos favoritos fue Demasiada suerte, de Maeva Nieto, pero tengo que admitir que no soy nada objetiva con la autora porque me encanta todo lo que escribe. En este caso, no iba a ser menos, nos presenta una feria de España en los años 70 junto a un zapatero y una florista. 

Terminamos la antología con los relatos de Mar Román y Natalia Belchi. Mar escribió Cosas que pasan en la niebla, otro de mis relatos favoritos. De este relato no quiero comentar la trama porque me parece una maravilla descubrir por dónde van los tiros cada una, pero es una historia que me ha parecido una genialidad y no me esperaba para nada ese final porque te metes tan dentro que no te lo esperas. El relato de Natalia es No te subas en la noria y sobre cómo dos adolescentes se suben a la noria en el vagón número 7 y acaban en otra realidad alternativa. Me ha recordado un poquito a Stranger Things, pero me ha gustado un montón, sobre todo que los personajes sean muy reales y nos muestra a unos adolescentes haciendo el tonto y arriesgando su vida.

Parece que todos los relatos han sido mis favoritos, pero porque todos tienen una calidad literaria increíble. Como he dicho al principio, me ha costado bastante elegirme por mis favoritos y es bastante extraño que te gusten todos los relatos de una antología al haber mucha variedad, pero a mí me ha encantado. Ya disfruté mucho de la otra antología que he leído de la editorial, Al atardecer en Samhain, donde también me gustaron mucho todos los relatos, así que me dispongo a leer próximamente la otra antología que me queda de la editorial. Os recomiendo mucho Entre luces de feria porque vais a poder disfrutar de unos relatos geniales de autoras nacionales.

«—Puede que el mundo nos trate hoy de forma diferente, pero tal vez mañana las cosas cambien y quiero recibir el cambio con una sonrisa.» —Marea incendiaria, de Laura Martín Hinojal.

Otras antologías de la editorial reseñadas en el blog: