Bajo esquirlas de hielo

Bajo esquirlas de hielo | Sheila Carnero | Roomie Ediciones | Fantasía, aventura | Conclusivo | 450 páginas | 16,65/3,99€ | 9788412076462 | Comprar en físico y digital

Hace cincuenta años, Wermon quedó sepultado bajo una capa de nieve tóxica. Desde entonces, cada persona que se adentra en el pueblo desaparece bajo extrañas circunstancias. Las leyendas urbanas hablan de monstruos de escarcha y hechiceros enloquecidos, pero nadie ha sido capaz de desvelar el misterio.

Tayllon trabaja como becario en la gaceta La Era y es un ferviente defensor de la magia; Riaza es reportera en Nuevas de Kimber y todo lo que ansía es descubrir la verdad.

El aniversario de lo que ahora se conoce como la Gran Nevada arrastrará a los dos periodistas al norte para cubrir la noticia. Juntos se enfrentarán al reportaje más difícil de sus carreras, aunque eso signifique poner en peligro sus vidas y sus secretos.

Gracias a la editorial por el ejemplar

Tayllon es un joven que trabaja de becario para La Era, una de las gacetas más importantes de la ciudad. Su pasión por el periodismo viene de su abuela, quien confía en el firmemente, pero lleva con un contrato de becario desde hace tres años y lo normal es uno... Aun así, y con todos los comentarios de su padre y hermana, no ha perdido la esperanza de que en algún momento le manden a hacer un reportaje en condiciones. Lo que no se espera es que, cuando llega ese momento, le manden a Wermon a hacer un reportaje por el aniversario de la Gran Nevada. Tayllon conoce todas las leyendas en relación a esa ciudad y todos los desaparecidos que ha habido, pero también sabe que puede ser la oportunidad perfecta para que se le tome como un periodista de verdad.

Por el contrario, Riaza es una joven reportera en Nuevas de Kimber, está un poco harta de los reportajes que no tienen importancia cultura, sobre todo esos que son sobre la subida del precio del arroz. Por eso mismo, cuando su jefa propone en la redacción ir a cubrir el aniversario de la nieve tóxica, ella no duda en levantar la mano. No es como el resto de la población, que piensa que lo que ocurrió es obra de la magia, si no que tiene que haber una explicación lógica y racional. Ella piensa descubrirlo y, además, darle voz a todas aquellas personas que han desaparecido en las inmediaciones de Wermon, piensa hacerlo con la ayuda de Tayllon, el becario al que tiene que aguantar por un reportaje en conjunto de los dos periódicos, o sin él.

Tayllon y Riaza se ven metidos de lleno en un reportaje en común. Al primero no le hace mucha gracia estar allí, sobre todo porque él sí cree en la magia y piensa que la nieve tóxica de hace tantos años tiene mucha relación con la magia. Riaza, en cambio, piensa que son tonterías y tiene que haber una explicación racional para ello, ¿y cómo iba a fiarse de un periodista que está contratado como becario desde hace tanto tiempo y ni siquiera parece mayor de edad? Literalmente, es un pensamiento que tiene la propia Riaza y es algo que me molestó mucho, me parece que no toma en serio al pobre Tayllon y me da mucha penita en varias ocasiones, pero a medida que avanza la historia, Tay demostrará ser mucho más que un simple becario y es algo que me gusta mucho.

«Un viaje al pasado, cuando la tecnología era algo extraño y el mundo aún se regía por las leyes de la magia.» 

Llevaba con ganas de leer esta historia desde prácticamente su publicación. Un par de amigas me habían hablado muy bien del libro y a la autora ya la había leído en dos antologías. Debo decir que me ha sorprendido un montón esta historia, por supuesto que para bien. Me ha encantado de principio a fin. Sheila Carnero ha creado un mundo de fantasía muy guay. Ha mezclado elementos de fantasía con elementos cotidianos muy parecidos a los que tenemos, ya que al final tanto Tayllon como Riaza son dos reporteros que se meten en líos. Además, está muy bien llevado, ya que en ningún momento te colapsa la información, que es lo que me suele pasar en las novelas de este estilo, si no que te lo da en cuentagotas para poder ir descubriéndolo poco a poco.

La historia está contada en tercera persona desde el punto de vista de Tayllon y Riaza, así que podremos conocer a estos dos personajes en profundidad. Tengo que admitir que desde el minuto uno, adopté a Tay como mi hijo al que hay que proteger. Mientras que Riaza es una persona decidida, excéntrica y cabezota, Tayllon es algo tímido, tiene las ideas bien claras, pero le cuesta decirle que no a las personas así que se ve arrastrado a situaciones que se le escapan de su alcance. El punto fuerte de esta historia es esa diferencia entre ambos. Y, lo dicho, Riaza al principio de la historia me caía más bien mal, pero a medida que se ven metidos de lleno en problemas, cambia un poquito su forma de actuar con él y, aunque no termine de caerme bien, creo que es un muy buen personaje.

Bajo esquirlas de hielo es una historia de fantasía, que se va directa a mi lista de libros favoritos de este año, pero sin pensarlo; es un libro escrito para ser disfrutado, para meterte de lleno junto a Tayllon y Riaza y descubrir qué es lo que pasó realmente en la Gran Nevada; y, con unos personajes que te dejarán el corazón blandito. Es el típico libro que te da pena acabarlo porque no quieres despedirte de los personajes, pero al mismo tiempo quieres acabarlo porque necesitas saber qué va a pasar. La historia tiene un final cerrado, que no da pie a una continuación, pero espero que esta no sea la última vez que disfruto de Tayllon y Riaza.

«Bailarían hasta que la vida desapareciera; y, con ella, las preocupaciones.» 

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